Papi...
La persona más inteligente que este mundo sostiene...
...tengo miedo que se pierda tanta inteligencia.
Por eso me aferro al poco de su brillantez que tantos años de convivencia con él me dejaron "robar" e intento hacer lo que él no pudo... o que la vida no le dejó hacer...
Lo intento con todas mis fuerzas aunque a veces me cueste. Lucho lo más que puedo por no cometer sus errores aunque a veces la vida de terca se antoja en mostrarme las mismas encrucijadas que a él le mostró. Siento que no puedo fallar. No LE puedo fallar...
...porque lo quiero, mucho, muchísimo. Porque lo extraño, demasiado, exageradamente.
Porque soy él y no lo puedo negar: heredé sus sueños, sus inquietudes, su voluntad de hierro, su país, su nacionalidad, su esperanza, su futuro y hasta su nariz... aprendí de él la sed insaciable de aprender, de buscar lo que hay por detrás de todo... aprendí a pensar y a comprender... heredé su tenacidad y su terquedad, sus amigos y enemigos, hasta sus fanatismos y muchos de sus gustos. Heredé sus defectos. Y cómo me gustaría hacer gala de sus virtudes.
Por ti, papi, que tienes la inteligencia, el brillo, el don, y sólo te ha faltado... la suerte y la... maldad. Por ti más que nadie quiero triunfar. Ya sabes que mi triunfo no es tener millones, casas grandes, trofeos o condecoraciones... mi triunfo es ser feliz, es hacer lo que me nace de la mejor forma posible para no rendirme ante la frustración.
Por ti puedo parecer egoista... porque parece que sólo quiero lo mejor para mí... y aunque sea la verdad, en el fondo no es tan así porque de una forma u otra YO soy TÚ y tú lo sabes...
...por eso tranquilo, ojitos mielosos al cielo, narizota empinada, coje aire y apriétame ese Huguito... pecho estirado y adiós semblante derrotado, que mientras a mí no me derroten, no te podrán derrotar a ti... voy a hacer todo lo posible para cumplir tus sueños...